DERROTA

El pequeño Terry llegaba a casa cabizbajo, lleno de barro y sangre. Silencioso, cruzó el comedor sin reparar en las miradas de sus padres. Un portazo indicó que se había encerrado en la habitación, como siempre tras una derrota.

- Terry, hijo, ¿Qué ha pasado?- su padre esperaba al otro lado de la puerta.
- Nada, Hemos vuelto a perder- respondió sollozando.

La puerta se abrió; La habitación era un museo dedicado a las armas; Espadas, escudos, alabardas, mazas...El chico jugaba con una daga, sentado en el suelo.

- Sabes que nunca se gana eternamente.
- Pero los trolls hicieron trampas. Mataron a cinco de los nuestros antes de que sonara el silbato.
- Otras veces ha sido al revés. Así es el juego.
- Ya, pero...
- ¿Y tú?
- Acabé con seis de ellos con el arco. Luego me hirieron en la cabeza- señaló diez puntos de sutura que le recorrían la frente- y no me acuerdo de más. La próxima vez no tendrán tanta suerte – su cara se llenó de odio.


“Chiquillos” pensó el padre al terminar la conversación. Ahora tocará hablar con las familias que han perdido a algún chaval. Eso haría que se perdiera el último reality show con mas audiencia del último siglo:“Conflicto Final” la lucha definitiva entre Orcos y Enanos.